Esto del entrenamiento solidario ha sido una gran idea por parte de los amigos del club Don Quijote. Esperemos que sea el primero de muchos. Enhorabuena por esta idea y porque se ayuda a un institución como el Cotolengo, donde, seguramente, toda ayuda es poca.
Como estoy hecho literalmente "una mierda" no he ido ni a Balazote, ni a Bienservida, ni a Molinicos y no voy a ir a Riopar. Ya veremos cuando puedo volver a una carrera, esperemos que sea en Barrax, porque antes lo veo dificil. Bueno, pues precisamente por esto, este tipo de eventos, como el entrenamiento solidario, me viene muy bien, por lo menos para no perder el contacto con los amigos de las carreras. Por cierto, muy bien la organización, pasamos un buen rato haciendo lo que nos gusta, y además, y creo que los más importante, había muchos niños que se lo pasaron en grande, primero calentando con Pedro, y luego corriendo con sus padres, o como en mi caso, al revés, yo corrí con mi hija, luego a luego ya no puedo seguirla. Estuvimos unos cuantos miembros del club. A saber: Mª Jesús y Alberto con sus dos hijas, Sebas con su hija Irene, Pedro, Jose Manuel "El fuerzas", Juanito Trampolín, Blas, acompañado de su exnovia, Jota y familia y yo mismo con mi hija María.
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Y después, Juanito Trampolín, nos tenía preparado un almuerzo en el restaurante del Tiro Pichón, y vaya almuerzo, estuve todo el día sin poder moverme ¡IMPRESIONANTE!
También estuvo presente, y parece que por fin recuperado, Ángel Cuevas, el cual ha hecho hasta el momento todas las carreras del circuito y ha conseguido dos primeros puestos en su categoría, en Balazote y Molinicos. Está de vuelta.
Hasta mañana, si vivimos.
